Por: María Hernández
Existen muchos lugares que, por la gran cantidad de ciudadanos del vecino Haití que habitan por ahí, se parecen al muy mencionado Hoyo de Friusa.
Lo que sucede es que hay regiones en donde viven haitianos de buena posición económica y que no se sienten. Su nivel intelectual, cultural y económico les permite vivir en residenciales en donde solo habitan los ricos de este país.
Son zonas en donde se vive como en muchos estados de Estados Unidos, donde nadie conoce a nadie y los vecinos no se conocen. No saben si a su lado viven chinos, haitianos, colombianos o venezolanos, que son los visitantes que con más frecuencia se encuentran en nuestro país.
A los ciudadanos haitianos se les ha dado la oportunidad de invertir en todos los renglones, en el transporte, inmobiliaria y negocios de servicios diferentes.En el Conde, Ciudad Colonial, muchos de los negocios son propiedad de empresarios haitianos, como se puede determinar.
Desde hace décadas hay barrios y residenciales que se caracterizan porque los que viven en esos sectores son extranjeros, haitianos en su gran mayoría, de los que no se tiene información sobre su estatus porque en esas zonas privilegiadas no se realizan operativos de la Dirección General de Migración.
Nunca en la República Dominicana se había visto que un motorista de origen haitiano , por ejemplo, cobre más que un taxi, 500 pesos por llevar un pasajero desde el Metro de la San Vicente de Paul hasta Ciudad Juan Bosch.
Una gran parte del transporte en nuestro país está siendo dirigido en su mayoría por haitianos, en paradas como la 25 de Febrero, que se estacionan en la México con Duarte.
Al igual que en muchas paradas del Metro en donde hay motoristas de la vecina nación que cobran a sobreprecio a los dominicanos.
También, el entorno de la avenida Ecológica, desde el parque que está frente a la Sirena, en esa avenida, hasta la entrada de Ciudad Juan Bosch se han improvisado negocios que dicen, muchos corresponden a extranjeros, legales o ilegales de Haití.
Sería importante recomendar a los ciudadanos organizados en la Amtigua Orden Dominicana que van a protestar el 30 de marzo al sector de Friusa, en el Este de la República Dominicana que deben planificar encuentros en todo el territorio nacional en donde los pobladores del vecino Haití sean mayoría en nuestro país con un estatus irregular y usurpando nuestros recursos económicos y medioambientales.